La Gincana de los TIC Cámara
La Cámara de Comercio, saca periódicamente varios programas para ayudar a pymes y autónomos a ser más competitivos a través de las nuevas tecnologías y la innovación, ofreciendo a las empresas que solicitan participar en el programa, la realización de un diagnóstico sobre su situación actual respecto a las TIC o Innovación de coste cero para las empresas y posteriormente una ayuda de hasta 7000 euros para poner en marcha alguna de las acciones reflejadas en dicho diagnóstico y que sea de interés para la empresa en cuestión.
Hasta aquí todo bien. El problema, comienza cuando se abre el plazo de solicitud, ya que, al ser fondos limitados, y atenderse las solicitudes por riguroso orden de entrada en el registro, sólo los primeros podrán optar al programa.
La apertura del plazo de solicitud del programa TIC Cámara, se abrió el pasado 19 de mayo a las 9:00, y ya nos informaban desde la oficina central de la Cámara de Comercio de Badajoz, que a las 9:10 de la mañana de ese día, ya se habrían agotado los fondos, porque había consultoras que habían avisado de que se presentarían en los distintos registros de las distintas oficinas de la Cámara de Comercio distribuidas por todo el territorio, para ser los primeros en meter por registro sus solicitudes. Es decir, empresas de Badajoz capital, se habrían desplazado a oficinas comarcales de todo el territorio para no tener que esperar las largas colas que se preveían en las oficinas centrales de las ciudades, que dificultarían su acceso al programa.
La cuestión es que estas oficinas situadas en las distintas comarcas, cuyo objetivo es ofrecer servicio a la población local, fueron ocupadas por consultoras de Badajoz, que venían con un gran número de solicitudes de empresas de Badajoz ciudad, no de empresas afincadas en la comarca en cuestión para la que se destinan estas oficinas, impidiendo en este caso el acceso a los fondos de las empresas afincadas en estas comarcas e impidiendo un reparto igualitario de los fondos por el territorio.
Por hablar del ejemplo que viví en primera persona, en la oficina de la Cámara de Comercio de Llerena, había una hoja donde las empresas que iban llegando se debían apuntar para saber el orden de espera, y cuál fue mi sorpresa cuando vi que había personas de empresas de Badajoz, apuntadas en esa lista desde el día anterior y que para impedir que nadie entrara en registro sus solicitudes antes que ellos, durmieron en la calle. Una auténtica locura.
Las personas de la Comarca de la Campiña Sur de Extremadura, que nos dirigimos a nuestra oficina local de la Cámara de Comercio, la de Llerena, estábamos atónitos, porque, al ver el panorama, por muy temprano que estuviéramos en el registro, sabíamos que nuestras solicitudes no serían atendidas, porque empresas de Badajoz, con solicitudes de empresas de Badajoz, en lugar de dirigirse a su oficina, habían ocupado la nuestra y esto hacía que nuestras solicitudes entraran en el registro cuando los fondos ya estuvieran agotados.
La reflexión que puedo hacer al respecto, es que esta manera de permitir la entrada en solicitudes en registro, no es la mejor, ya que impiden el reparto igualitario por todo el territorio, al permitir que empresas consultoras gestionen gran cantidad de solicitudes, e impedir con prácticas como “llegar el día antes”, “apuntarse a una lista desde el día antes”, “dormir en la calle”, etc., que las empresas del territorio, a las que dan servicio las antenas de la Cámara de Comercio Locales, puedan acceder a los servicios que éstas les prestan.
Podemos afirmar, que el territorio de la Campiña Sur de Extremadura, y probablemente otros territorios, no se verán beneficiados por el programa TIC Cámara y seguiremos estando en desventaja competitiva con el resto del territorio. Esperamos que situaciones como la vivida la semana pasada, no vuelvan a ocurrir por el bien de todos.
